Entrenamiento solidario de la Agrupación con mujeres refugiadas
El lunes 27 de febrero pasado, la Agrupación de Jugadores y la Fundación FC Barcelona unieron fuerzas para organizar una sesión de entrenamiento juntamente con la AE Ramassà, una entidad deportiva y social que fomenta un proyecto inclusivo que tiene como objetivo facilitar la integración de mujeres recién llegadas al país en situación de petición de asilo o refugiadas. La Fundación colabora con esta iniciativa desde sus inicios en septiembre de 2021 y en esta ocasión se ha sumado también la Agrupación para reivindicar la importancia de la mujer alrededor del 8M. Esther Imaz, Esther Torrecilla, Cristina Molina y Flor de Luna Pila, exjugadoras miembros del equipo femenino, y los dos entrenadores, Joan Carles Hidalgo y David Forcat, lideraron el encuentro y, junto al equipo educador del Ramassà, llevaron a cabo una actividad muy satisfactoria para todas las partes. También estuvo presente el vicepresidente de la Agrupación, Rafael Zuviría.
El entrenamiento constó de varias partes en las cuales se realizaron ejercicios de todo tipo: series de coordinación, “rondos”, ruedas de pases y, finalmente, un partido con los técnicos y las jugadoras. Desgraciadamente, la sesión terminó un poco antes de lo esperado por culpa de la lluvia que cayó en las instalaciones del complejo deportivo de la Universidad de Barcelona. Sin embargo, la tarde acabó con un diálogo abierto a todos los participantes en el que compartieron algunas de las reflexiones que extrajeron a lo largo de la hora y pico de la actividad.
Una de las miembros de la Agrupación asistentes, Esther Imaz, afirma que le gustaría repetir la experiencia: “Se nos hizo corto. Debido a las condiciones meteorológicas adversas no pudimos acabar de conocer a las mujeres refugiadas tal como nos habría gustado pero la actividad estuvo muy bien. Antes de empezar, no sabíamos demasiado con qué nos encontraríamos y la experiencia fue muy positiva. Las jugadoras estaban encantadas con nuestra visita”. A Imaz le impactó el comentario de una de las jugadoras: “Lo único que me gusta de mi semana es el fútbol y ahora tenemos que irnos por la lluvia”. Esto demuestra que el proyecto del Ramassà es todo un éxito pues ayuda a personas vulnerables a integrarse y sentirse valiosas.